III.- República Dominicana y la eterna crisis haitiana...
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¿Qué hizo Estados Unidos con México y con Colombia? Les despojó de territorios y nada sucedió. Muy pocos dominicanos conocen cómo se mueve la Historia. ¿Cuántos han analizado lo que Inglaterra hizo con la mayoría de países del Medio Oriente y con algunos del Lejano? ¿O lo que Francia, Holanda, Italia, Bélgica y Portugal hicieron con la mayoría de países africanos y unos pocos asiáticos? En República Dominicana, al más encumbrado oligarca, al más connotado burgués (dominicano, no español ni árabe), al más acabado político (sólo hubo uno, y fue el único con intenciones de someter a Haití; sin embargo, fue traicionado por la perversa cúpula militar, la misma que se encargó de darle el golpe de Estado) y al más beligerante y activo de los líderes sociales (¿existe alguno?) muy poco les interesa hacer cosas grandes en términos históricos. En todos prima la pequeñez, el enanismo; por eso el réprobo miedo colectivo de expresarse con independencia sobre Haití, a tomar la medida que haya que tomar para acabar con la despreciable clase alta haitiana.
Eugenio María de Hostos, "Ciudadano de América"
Basta echar un vistazo a la conformación social del país para mitad del siglo XIX para saber lo que era la sociedad inmediatamente después de la independencia. Sin embargo, no hay que hacerse ilusiones con la que existe hoy. Aun con el desarrollo económico que muestra el país -y los más de 4 millones de dominicanos ubicados en la pequeña burguesía de las capas media y alta, y en los estratos superiores-, sus gobernantes, líderes políticos (si es que los hay) y la cúpula de la sociedad civil no tienen el coraje de hacer lo que hicieron sus iguales de los países mencionados con anterioridad. Total: en resumidas cuentas vamos a tener que cohabitar con los haitianos hasta que el planeta Tierra deje de existir.
Si lo anterior se hubiese materializado desde que fue derrotado el intento de anexión a España por parte de Pedro Santana y su clan de hateros, la 'haitianidad' no existiría hoy, y esos ciudadanos del oeste de la isla -sufridos, vejados, convertidos en desechables en su propio país por lo que el capitalismo llama clase alta- fueran dominicanos, hablaran dominicano [no castellano; esa es otra de las tareas pendientes que tiene el país: establecer el dominicano como idioma oficial, ya que del castellano (de la España criminal y perversa) no hablamos ni "jota", como también está pendiente que el nombre del país sea Dominicana, a secas, sin el sustantivo República], "honraran su familia, la libertad de comercio, la moralidad del matrimonio, el odio a la poligamia, un mejor destino para su raza, mejor suerte para su trabajo, la escuela de sus hijos, el respeto a la religión, la seguridad individual, la facultad de poder viajar, la civilización, la luz y el bien" (para enaltecer aquellas palabras que con diafanidad expresara Eugenio María de Hostos, el Ciudadano de América que entregó su existencia a la lucha por la separación de Puerto Rico y la unidad de las Antillas Mayores y toda Hispanoamérica).
Fin...
Ing. Nemen Hazim Bassa
San Juan, Puerto Rico
18 de noviembre de 2021