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IV.- La baja pequeña burguesía y el neotrujillismo...

Los daños ocasionados por el perredeísmo peñagomista en una sociedad eminentemente bajo pequeño burguesa no tienen forma de reponerse. Entre el PRD y la sociedad dominicana parece no haber diferencias: o el PRD da origen a la sociedad, o la sociedad engendra al PRD. La perspectiva de un nuevo Trujillo en el poder -y decimos un nuevo Trujillo; no hablamos de un nuevo dictador con otro apellido-, está siendo fomentada por "los que dejaron tras de sí la fetidez propia de todo lo que se corrompe"​...

Los daños ocasionados por el perredeísmo peñagomista en una sociedad eminentemente bajo pequeño burguesa no tienen forma de reponerse. Entre el PRD y la sociedad dominicana parece no haber diferencias: o el PRD da origen a la sociedad, o la sociedad engendra al PRD. La perspectiva de un nuevo Trujillo en el poder -y decimos un nuevo Trujillo; no hablamos de un nuevo dictador con otro apellido-, está siendo fomentada por "los que dejaron tras de sí la fetidez propia de todo lo que se corrompe".

La señora Angelita Trujillo se presentó en varias ciudades fuera de la República Dominicana para poner en circulación su libro "Trujillo, mi padre en mis memorias", y la mayoría de los que asistieron pertenecía al Partido Revolucionario Dominicano. De Miami y de Nueva York las evidencias sobran, y de aquí, de San Juan -Puerto Rico-, ni hablar. No conocemos uno solo de los que asistieron -en ningún lugar del mundo- a la puesta en circulación del libro que lo haya leído o haya comentado, ni para bien ni para mal; lo único que importaba era asistir a una actividad que le permitiría tener una exposición que jamás soñaron en sus vidas, en la que hasta podrían conversar con la realeza, condición de vida con la que se crió la protagonista del revuelo trujillista.

El poco conocimiento político de muchos de los integrantes de la baja pequeña burguesía perredeísta no le permite ver lo que se esconde detrás de estas actividades neotrujillistas, y la casi inexistente base académica e intelectual los convierte en activistas partidistas que hacen totalmente lo contrario a la razón de ser de la agrupación que los parió.
No es raro escuchar la baja pequeña burguesía perredeísta alabar a Trujillo o cantar sus merengues, y a seguidas verla disfrutar de una canción de Silvio Rodríguez o de Mercedes Sosa, artistas muy definidos en la orientación de sus canciones;

No es raro escucharla argumentar -en su lucha partidista actual por la toma del poder- que Leonel Fernández viola la Constitución de la República y que Trujillo nunca lo hizo;

No es raro escuchar a unos cuantos "traumados" mentales de la baja pequeña burguesía perredeísta igualar los asesinatos políticos y raciales del tirano con los crímenes que se dan hoy en la sociedad dominicana -producto de la violencia que generan las drogas-, y que adjudican al mandatario de turno;

No es raro escuchar a estos lumpemproletariados repetir como gallaretas los disparates que los enemigos de Juan Bosch inventan para difamarlo y calumniarlo;

No es raro oír del pequeño burgués perredeísta acusaciones contra el mandatario de turno por sus relaciones con el "comunista" Chávez -y con Venezuela-, y a los pocos minutos escucharle interpretar las canciones de Los Guaraguao;

No es raro escucharle pronunciar loas al régimen despótico de Trujillo y a seguidas oírlo cantar composiciones que aluden el heroísmo de Francisco Alberto Caamaño;

No tiene nada de extraño escuchar a la baja pequeña burguesía perredeísta decir, en su gestión alabadora de la tiranía, que Trujillo no fue quien gobernó en aquellas administraciones en las que ejercieron los presidentes fantoches Jacinto Peynado, Joaquín Balaguer, Manuel Troncoso de la Concha y Héctor Bienvenido Trujillo;

No es raro escucharla decir que las hermanas Mirabal no fueron vilmente asesinadas por el personaje de peor calaña que ha parido la tierra dominicana;

No es raro oírla, dentro de su mismo partido, detractar la figura de un precandidato a la presidencia por su parentesco con la familia Trujillo, y al mismo tiempo escucharla defender con soberbia la dictadura del terror, de los asesinatos, del robo burdo al erario público, de las violaciones de niñas y del exterminio de haitianos;

No es raro escuchar al pequeño burgués perredeísta defender el lado podrido del trujillismo, con Angelita a la cabeza, sin conocer siquiera el nivel intelectual, el valor, la determinación y la convicción de Aída Trujillo, nieta del dictador y vanguardista del juicio al papel político que desempeñó la tiranía;

No es raro ver muchos integrantes de la baja pequeña burguesía perredeísta plagiar el intelecto ajeno y escucharlos hablar como si sus pequeños cerebros tuvieran derecho de autor...
Así funcionan algunos perredeístas de la baja pequeña burguesía. No es de dudar, por su conducta, que unos pocos hayan llegado al extremo de recibir "remuneraciones" y financiamiento para fungir como voceros del neotrujillismo. A esta actividad se "dedican -y dedicaban, pues algunos han muerto-" los hijos no reconocidos por el sátrapa, en lugares donde la concentración de dominicanos es significativa: Miami, Nueva York, Boston, San Juan -Puerto Rico- y Santo Domingo (obvio). Incluso mucho se ha hablado de la probable participación de dos o tres desaguisados en el campo del espionaje, mejor conocido en el lenguaje del pueblo dominicano como "caliesaje".

Estos perredeístas de la baja pequeña burguesía, por el protagonismo que juegan en la sociedad -sobre todo en los núcleos en los que ejercen influencia-, y por su "sabelotodismo", son los que se convierten en el caldo de cultivo para el surgimiento del neotrujillismo. Identificarlos en cualquier parte del mundo es muy fácil: sólo hay que escucharlos... ¡LAS HERMANAS MIRABAL MERECEN EL RESPALDO, EL RESPETO Y LA ADMIRACIÓN DE TODOS LOS DOMINICANOS POR SU SACRIFICIO EN ARAS DE LA LIBERTAD DE LA PATRIA!

Fin...

Ing. Nemen Hazim
San Juan, Puerto Rico
23 de noviembre de 2010